La piedra aguamarina es símbolo de felicidad, juventud, vitalidad y espiritualidad. Se piensa que reduce el estrés, purifica las energías circundantes, calma la mente, despierta estados elevados de conciencia y da una sensación de paz interior muy profunda. Este cristal combate las fuerzas de la oscuridad, facilita la comunicación con los seres de luz, favorece la meditación y bloquea los pensamientos negativos de otras personas.

El citrino es una piedra energética que atrae la alegría, la autoestima y la prosperidad. Se solía usar para transformar los pensamientos negativos derivados del miedo y la ansiedad en sentimientos mucho más positivos y calmados. Estimula la creatividad, la intuición y la confianza en uno mismo. Además, según afirman, mejora el control de las emociones.

El cuarzo rosa es la piedra del amor incondicional y la paz infinita. Es el mineral más importante para el chakra corazón, ya que enseña la verdadera esencia de amor. En el plano emocional, el cuarzo rosa es el mejor sanador, libera las penas y las emociones no expresadas, alivia el dolor interiorizado y sana las carencias. Facilita el perdón y la autoaceptación, invoca autoestima y confianza en uno mismo.

La turmalina negra se considera una piedra de referencia para la limpieza, la protección y la transformación. Absorbe las energías densas y las dirige hacia la tierra para ser transmutadas. La turmalina es eficaz para vivir en armonía y dejar a un lado las preocupaciones.  La turmalina negra es perfecta para la meditación, ya que aporta estabilidad emocional y claridad en las ideas.

La Amatista es la piedra energética por excelencia con propiedades extraordinarias, muy utilizada para la limpieza del aura, poder curativo, protección de las envidias, celos y rabias.  Útil en la toma de decisiones, aporta sentido común e intuición. Ayuda a equilibrar las emociones, disipando la ira, el miedo y la ansiedad.

Protege contra las energías negativas como la envidia, la codicia, la rabia, y otros pensamientos destructivos. Ayuda a disolver las energías densas, promueve el pensamiento positivo y aporta calma emocional. También ayuda a alcanzar la relajación mental, haciendo que las personas alcancen un nivel de concentración más elevado, mejorando su creatividad.

La labradorita equilibra de forma interna, alejando las energías negativas. Reduce el miedo y la inseguridad, mejora la concentración y ayuda a calmar la mente, aportando equilibrio y estabilidad. La labradorita también consigue reducir la  ansiedad o la tristeza.

El Apatito es conocido como la piedra de la sinceridad. Utilizado como amuleto para afianzar lazos de amistad sincera.  También se considera una piedra motivadora, la cual promueve la ambición y la independencia.  Aumenta la creatividad, trayendo conocimiento a quienes se encuentren en sintonía con ella. Se dice que el Apatito aumenta las reservas de energías y la motivación.  Provee de claridad y paz interior además de unidad con el ser superior.

Se le conoce como el maestro sanador pues tiene efectos sobre otros cristales, es ideal para meditar y absorber energías negativas. Ayuda a la concentración, desbloquea la memoria, estimula el sistema inmune y equilibra el cuerpo.

La obsidiana es una piedra protectora, que forma un escudo en contra de la negatividad, absorbiendo las energías negativas del entorno. Espiritualmente vitaliza el alma y elimina los bloqueos energéticos y posibles tensiones. Estimula el crecimiento a todos los niveles, animando a explorar lo desconocido.

La amazonita nos llena de valentía, fortaleza mental y claridad para tomar decisiones importantes.  Es una piedra calmante en episodios de estrés, mejora la creatividad y nos ayuda a expresarnos, a sacar lo que llevamos dentro.

El cuarzo Herkimer es un poderoso cristal de sanación que tiene como propósito unificar cuerpo y alma y espíritu creando una fortaleza emocional y  espiritual inquebrantable en su portador.  Este cristal también puede ayudar a liberar la tensión en su cuerpo, brindando una sensación de paz y serenidad. Despejará los bloqueos en tu aura para que las energías positivas comiencen a fluir.

La pirita de hierro es un excelente escudo energético. Bloquea y corta el paso a la energía negativa en todos los niveles. Es una piedra muy positiva, facilita el contacto con las propias habilidades, estimulando el flujo de energía. Alivia la ansiedad y la frustración, potenciando la autoestima y confianza.